Listamos el proceso repetitivo con los cinco factores de un negocio:
- Crea y ofrece algo de valor…
- Que los demás quieren o necesitan…
- A un precio que están dispuestos a pagar…
- De un modo que satisface las necesidades y expectativas del cliente…
- De tal manera que el negocio reporte los beneficios suficientes para que los propietarios sigan adelante con la operación.
¿Eliminarías alguno de los cinco factores de un negocio?
Si eliminas alguno de estos cinco factores de un negocio, te queda sin él… Una empresa que no genere un bien o servicio de valor para los demás no es una empresa sino un hobby. Que no llame la atención es un fiasco. No venda el producto de valor que genera es una empresa con pérdidas. Una empresa que no ofrezca lo que promete es un fraude. Que no ingrese suficiente dinero para seguir operando cerrará inevitablemente.
En el fondo, los negocios son en esencia la suma de cinco procesos «interdependientes» (término que retomaremos más adelante), cada uno de los cuales confluye en el siguiente:
- La creación de un producto de valor. Descubrir lo que la gente necesita o quiere y crearlo.
- El marketing. Llamar la atención y generar una demanda para lo que hemos creado.
- Las ventas. Convertir a potenciales clientes en clientes seguros que pagarán por adquirir este producto de valor.
- La provisión del bien o servicio de valor. Dar a los clientes lo prometido y asegurarse de que estén satisfechos.
- Las finanzas. Ingresar el dinero suficiente para seguir funcionando y hacer que nuestro esfuerzo
- haya valido la pena.
Los negocios no son cosa de genios
Si estos cinco factores parecen simples es porque lo son. Los negocios no son cosa de genios, ni nunca lo han sido. Son sencillamente el proceso de identificar un problema y encontrar una manera de solucionarlo que beneficie a ambas partes. Quien intente hacerle creer que dedicarse a los negocios es muy complicado, o bien está intentando impresionarle, o intenta venderle algo que no necesita.
Los «cinco factores de un negocio» constituyen la base de un buen proyecto empresarial y de un buen plan de negocio. Si eres capaz de definir con claridad cada uno de estos cinco procesos en una empresa cualquiera, entenderás perfectamente cómo funciona. ¿Estás pensando en montar un negocio? Lo mejor es empezar definiendo la forma que adoptarán estos procesos. Si no eres capaz de describir o dibujar un diagrama de tu idea de negocio teniendo en cuenta estos procesos fundamentales, significa que no conoce el tema tan a fondo como creía y no logrará que funcione.